Tomateros barre a Charros en juego marcado por conato

La rivalidad entre Tomateros de Culiacán y Charros de Jalisco, una de las más intensas de la Liga Mexicana del Pacífico, volvió a tomar fuerza luego de un encuentro en el que las emociones superaron lo deportivo. Ambos equipos, que han dominado la liga en la última década con siete campeonatos combinados, protagonizaron un juego que comenzó como un duelo regular y terminó con un conato de bronca que involucró a gran parte de los jugadores.

El ambiente se tensó en el tercer episodio cuando el lanzador de Jalisco, Luis Payán, golpeó con un lanzamiento a Ramón Ríos, lo que provocó el enojo inmediato del bateador. Aunque en ese momento la situación parecía quedar en un simple intercambio de reclamos, dos entradas después ocurrió un segundo pelotazo que detonó la confrontación. Ríos intentó dirigirse hacia el montículo, pero fue detenido por el receptor rival, lo que dio pie a empujones y a que se vaciaran ambas bancas.

Lo que inició en la lomita se extendió hacia varias zonas del campo, incluyendo el área detrás de home y el jardín central, donde grupos de jugadores de ambos equipos se encararon durante varios minutos. La situación fue contenida sin que se interrumpiera definitivamente el juego, permitiendo que el encuentro continuara bajo un ambiente más controlado pese a la tensión que quedó en el terreno.

Tras el incidente, el partido siguió su curso y Tomateros de Culiacán logró imponerse con marcador de 9-4, completando la barrida sobre los Charros y fortaleciendo su posición en la parte alta del standing. Con este resultado, el equipo guinda alcanzó un récord de 14 victorias y 12 derrotas, manteniéndose en la disputa por los primeros lugares de la temporada 2025-2026 de la Liga Mexicana del Pacífico.