Crisis agrícola se agrava en Sinaloa por el tomate

Tras la llamada entre la presidenta Claudia Sheinbaum y su homólogo estadounidense Donald Trump, se logró frenar temporalmente la imposición de aranceles del 30 % a las exportaciones mexicanas. Sin embargo, el tomate quedó fuera del acuerdo, generando preocupación por su impacto en el campo sinaloense.

El Departamento de Comercio de Estados Unidos dio por terminado el Acuerdo de Suspensión de 2019, activando un arancel antidumping del 17.09 % a las importaciones mexicanas de tomates frescos. Esta medida podría traducirse en la pérdida de hasta 50 mil empleos en Sinaloa durante el segundo semestre de 2025, según el Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA).

El secretario de Economía, Marcelo Ebrard, reconoció que, aunque se evitó un escenario catastrófico para la economía nacional, el sector del tomate sigue siendo uno de los puntos críticos no resueltos en la negociación comercial con Estados Unidos.

La situación se agrava por la crisis que ya atraviesa el campo sinaloense, golpeado por la violencia derivada de disputas internas en el Cártel de Sinaloa y por la sequía. El Inegi reportó que entre el primer trimestre de 2024 y el de 2025 se perdieron 23 mil 821 empleos agrícolas en el estado, una caída del 11.6 %.

Las mujeres fueron las más afectadas: 9 mil 517 perdieron su trabajo, lo que representa una contracción del 24.5 % en su participación laboral. En el caso de los hombres, la reducción fue del 8.6 %, con más de 14 mil empleos menos.

Expertos advierten que el nuevo arancel puede agravar aún más esta crisis, ya que el tomate es uno de los principales productos de exportación agrícola y una fuente crucial de empleo para comunidades rurales de Sinaloa.