Integrantes de la Asociación de Jubilados de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) se manifestaron en el Congreso del Estado para denunciar que la nueva reingeniería universitaria afecta los derechos laborales de ex trabajadores y eleva los costos de inscripción para los estudiantes.
La profesora jubilada Guadalupe Molina, representante de la asociación, explicó que el nuevo modelo, implementado tras la reforma a la Ley Orgánica Universitaria, contempla un fideicomiso mediante el cual se aplicarían descuentos de hasta un 20 % a las pensiones, sin haber sido convocados a consulta. Señaló que muchos jubilados son adultos mayores que no pueden defenderse y que la medida se impuso sin diálogo ni transparencia.
También cuestionó que, contrario a lo prometido en la propuesta original de ley —que buscaba reducir cuotas y evitar reelecciones en la rectoría—, las tarifas escolares han aumentado considerablemente. Indicó que algunos alumnos pagan más del doble, lo que ya generó manifestaciones, como la ocurrida recientemente en la Facultad de Odontología.
Los manifestantes solicitaron la intervención de los diputados locales para revisar la reforma universitaria y frenar los descuentos planteados, al tiempo que exigieron respeto a la libertad de expresión de estudiantes y trabajadores. Expresaron su disposición al diálogo, pero pidieron una postura clara del Congreso sobre la situación que, aseguran, afecta directamente a la comunidad universitaria.